En las escuelas de marketing y de negocios de todo el mundo se habla continuamente de colocar al cliente en el centro de la empresa, pero todos sabemos que mayoritariamente es la 129, la cuenta de resultados suele ser la que está en el centro de casi toda acción empresarial.
Solo cuando de nosotros se trata, nos colocamos a nosotros mismos en el centro de esa acción.
Y en más ocasiones de las necesarias cuando del diseño de un sitio web se trata sucede algo parecido; decimos que el website debe ser usable, pero suele significar que nos gusta a nosotros. Y el diseño web no es una cuestión de gustos… es una cuestión de diseño y de objetivos.
Que un sitio web sea usable no significa mucho más que el usuario consiga hacer del modo más fácil y rápido posible la acción para que el sitio se pensó.
Lo demás será todo para subir nota. La conversión o el objetivo, entendiendo como tales la compra, la descarga, la solicitud de información, o el relleno de un formulario, aumentar la imagen de marca, incluso querer tener mas seguidores en Facebook es lo que debe tener importancia en el diseño de un sitio web. Una empresa como norma general usará un sitio web para obtener más clientes o atender mejor a los que ya tiene.
La tipografía, los colores o los «call to action» de la web, deben ser pensados para esa proyecto concreto, para ese cliente al que va dirigido el sitio web. Si vendes «Ola ke ase», tu página deberá ser «Ola ke ase». Pero si tu sitio está orientando a clientes que buscan bancos de cordón umbilical, pues estaremos de acuerdo que no pueden ser iguales.
Hay un libro que se llama «Don’t make me think» (no me hagas pensar), que trata profusamente el tema de cómo debe orientarse cualquier acción de marketing, incluyendo el diseño, hacia la consecución de los objetivos, haciendo perder lo menos posible el tiempo a nuestro usuario.
Un particular o una empresa tiene la enorme fortuna de que una persona va a dedicar algo de su escaso tiempo a visitar su página, y quizá hasta se convierta en cliente. Por lo tanto, intenta tratarlo con respecto, y no le hagas perder el tiempo en buscar donde está el teléfono de contacto o cómo se puede comprar en tu estupenda tienda online con super diseño, pero en la que no pones cuánto vale el transporte hasta Lugo de una camiseta.